Anda, ponte un video.
De vuelta a la animación. Parrillada de videos. Cada vez más empresas solicitan por lógica que sus contenidos sean más llamativos y divertidos. Es por eso que tras caer Flash como "Dios animador de todas las cosas" en internet y pasar por un período Zen casi al más puro estilo nórdico y tirando de CSS